domingo, 25 de noviembre de 2012

CILENCIO SE FUE EN SILENCIO


Nació en 1938. Me resulta difícil recordar ahora en qué editorial nos conocimos. Fueron casi cuarenta años compartiendo páginas y la cautivante aventura del humor gráfico. Inquieto, locuaz, profundo, agudo en sus comentarios, triste a veces. Una de las personas más sensibles de este ambiente. También bondadoso y sobre todo humilde. Eludió las tentaciones de las cámaras y micrófonos y fue feliz desarrollando su talento siempre con bajo perfil.


Fue profesor de dibujo y pintura, guionista de radio y televisión. Trabajó en La Revista Dislocada, Tía Vicenta, Rico Tipo, Flash, El Gráfico, Radiolandia 2000, El Conventillo de Don Nicola, Tric y Trake, Mengano, Billiken, Anteojito, Caras y Caretas, Satiricon, Humor, Gente, Goles, Nocturno, María Bizca, Playboy, SexHumor, La Prensa, Crónica, El Mundo, Diario Popular, etc.

¡Y con cuánto fervor escribía! En su blog "Cilencio no se calla" desplegaba todo su entusiasmo. Ahora nos suena tristemente como una ironía, pero también nos afirma su inmortalidad. Quedan también desolados sus seguidores de este blog, que desde meses atrás se preguntaban por su ausencia cuando ya progresaba su enfermedad.

En este link se puede acceder a una de sus páginas:
http://cilencionosecalla.blogspot.com.ar/2011/06/loa-mi-mama-con-la-unica-foto-que-tengo.html


En Humor y SexHumor se divirtió con sus páginas a color pacientemente elaboradas con esos rojos y verdes estridentes y personajes que mezclaban extrañas fantasías con trazos impresionistas que le permitían deleitarse, casi como un niño, en detalles extravagantes. Sus exagerados sombreros, bigotes, fachadas y calles sugerían antiguos afiches o escenas surrealistas. Pero también con sus viñetas políticas denunció los abusos de los dictadores. Su hijo Alejandro, aquel niño que en sus comienzos veíamos algunas veces acompañándolo por las redacciones, hace una emotiva reseña en el mail donde comunica su muerte: "Este es el mensaje más triste de mi vida. Mi padre Cilencio, nos dejó físicamente. Todos los que lo conocieron lo recordarán por siempre porque tenía la facultad de decir las cosas más sencillas con una ironía y un humor envidiable. Muchos disfrutaron de su inteligencia, otros muchos de su afecto .Pero creo que quedará en el recuerdo de todos por su obra, que supo darle respiro a miles de personas en el momento más agobiante de la dictadura sus chistes en HUMOR(R) fueron una bocanada de libertad que le sirvieron a muchos para seguir creyendo en que algún día se acabaría. Y llegó el día que se acabó.

Mi viejo fue un héroe, se jugó las pelotas con inteligencia, con mensajes subliminales, con tiros por sobre elevación y casi al final del proceso con mensajes más que directos. Supo luchar, supo vivir y lo recordaremos para siempre."

Los que lo tratamos y vivimos con él muchos años en redacciones, exposiciones y viajes sentimos hoy que perdemos a un colega y amigo con valores y también una parte importante de nuestra historia. Ya no recibiremos sus correos donde bromeando nos adjuntaba retratos seriamente coloreados de las que decía eran sus secretarias. Queda el recuerdo de sus palabras en tantas reuniones de amigos, sus anécdotas, sus chistes, sus conocimientos y sus consejos. Era un placer escucharlo hablar de cine, humor, música, literatura y tantos temas más.

En este homenaje sumo el demostrado aprecio de sus colegas. Todos tendrán más de un motivo para recordarlo. Por mi parte rescato estas fotos:


Una de las inolvidables reuniones en mi casa. Ahora repaso esos momentos y me cuesta creer que ya no me encontraré más con él.



Y aquí con Jericles, Luiso, Tarico, Ceo, Niño y Chait durante una Muestra en el Centro Cultural Recoleta, que me permite recordar sus consejos a Ariel Tarico que comenzaba a asombrarnos con sus imitaciones: “¡Pibe, largá el dibujo, vos tenés un Mercedes Benz en la garganta!”

Finalmente inserto esta página publicada en la revista Humor:

 

Chau Cilencio. Ah…la reunión que nos habíamos prometido para despedir el año en mi casa la suspendemos. Nosotros también tenemos algo en la garganta…