sábado, 17 de diciembre de 2011

BUENOS AIRES CELEBRA

Haciendo un alto en la temática del dibujo, expongo aquí unas sencillas muestras de una afición que me entretiene y no quiero abandonar: la fotografía. Son cuatro videos con imágenes tomadas en las distintas jornadas del programa “Buenos Aires celebra” que organiza el Gobierno de la Ciudad para homenajear a todas las colectividades.


La Avenida de Mayo a lo largo del año se engalanó con danzas, cantos y costumbres de las naciones inmigrantes que en cada celebración dejaron el colorido de sus tradiciones.



Ver videos:

RUSIA

ITALIA

POLONIA

ESPAÑA
                                  ACLARACIÓN

Ante la siguiente advertencia recibida de YouTube:

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Sincerely,

- The YouTube Team 

 he tomado la decisión de borrar estos 4 videos más todos los que había subido anteriormente para evitar recibir posteriormente alguna sanción por la música de fondo utilizada, que podría originar alguna demanda de los poseedores de las licencias. Aunque la finalidad de los videos no tiene un uso comercial, debo someterme a las normas establecidas. En síntesis: los borro para que "no me rompan más las p......." Mis disculpas por escribir esta frase que utilizan muchos ciudadanos del mundo y que espero no esté registrada ni genere algún reclamo por derechos de autor.

martes, 6 de diciembre de 2011

EL MURAL DE BABEL

La convocatoria era interesante: en concordancia con el evento La Noche de las Librerías, el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires destinó un espacio en la Av. Corrientes para la realización de un mural. Una enorme superficie de chapa enmarcada de unos 33 metros por algo más de 2 de ancho. El tema era: libros, librerías y La Noche de las Librerías. Una invitación que prometía un agradable momento en camaradería y una organización que aseguraba la provisión de todo el material necesario, escaleras, pinturas, pinceles, etc. También una elemental reglamentación con sugerencias para ocupar espacios no muy grandes y menos de una hora para la realización de cada obra. Para evitar aglomeración, porque se inscribieron 251 participantes, se sugería llegar entre las 18 y 22 horas. Todo perfecto para ilusionarse y pasar una noche inolvidable. Y así fue. El resumen de esta historia inevitablemente no puede hacerse sin apelar al humor.



Llegué antes de las 19 hs y me pareció que habían llegado todos juntos y que en vez de 251 eran como 500. Era un enjambre humano trabajando desesperadamente apretados, algunos sentados bajo las piernas de otros y una tarde que había llegado a los 35 grados de temperatura. Las dos escaleras eran de solo dos escalones y una plataforma y eran disputadas por los que irremediablemente esperaban trabajar arriba. Ahí me di cuenta que debía incluirme en ese desgraciado grupo. Más abajo, donde la puja seguía, conquistar un pequeño espacio era como acceder a un terreno en Puerto Madero. Finalmente decidí buscar en los extremos y ahí lo vi a Maicas custodiando un pequeño espacio abajo y ya repuesto del pánico ante la perspectiva de tener que subirse a una escalera. Calculé que la espera para acceder a tocar la chapa le iba a llevar un tiempo impredecible y lo dejé preparándome para vivir la misma experiencia. Recorrí toda la extensión del muro y en el otro extremo, arriba de todo y casi ocultada por una construcción externa del subte tomé posesión de un espacio que supuse me alcanzaría para desarrollar el trabajo proyectado. Ahora debía irme a la caza de una escalera con el temor de que me usurparan el lugar. No se me ocurrió traer el doberman de un amigo para que me cuidara el espacio.


Otros colegas vivían el mismo drama y salían a buscar algo para treparse. Uno tuvo suerte y volvió con una silla prestada de un bar. Otros con cajones de gaseosas intentaron encaramarse, pero apenas llegaban al medio del panel. Uno tuvo la buena idea de recorrer las bolsas de residuos de la zona y apareció con un gabinete de televisor, y ahí lo vimos victorioso haciendo equilibrio peligrosamente. Pensé en hacer lo mismo, una heladera vieja me vendría muy bien, pero desistí porque soy un tipo sin fuerza y ante la posibilidad de morir aplastado por esa chatarra elegí la más digna de terminar desmoronándome con un pincel en la mano.


Finalmente opté por sumarme resignadamente a la cola de los que esperaban una de las escaleras. Todo seguía febrilmente, apretados unos con otros, mientras bajo mi espacio en blanco otra autora extendía su obra dibujando un pájaro con un cuello interminable que subía desplazando mi espacio hacia arriba. Al rato llegó otra con su hija de unos dos años, un poco inquieta la nena, a quien le ofreció para calmarla un largo pincel y una bandeja de pintura. Enseguida vimos al pequeño demonio repartir pinceladas en el muro y en el piso, mientras poníamos a salvo nuestros pantalones. Y como si fuera poco llegaban los parientes y amigos de algunos y se armaban unas sesiones fotográficas interminables, donde todos posaban frente a la obra y hasta llegaban a pedirnos que les tomáramos las fotos. Y el tiempo pasaba mientras el público que circulaba por Corrientes también se acercaba con sus flashes.


Al fin me llegó el turno de la escalera, pero la parte inferior del muro seguía ocupada por pintores que se esmeraban codo a codo. Imposible acceder, salvo colocándola a un metro y doblando mi cintura en noventa grados. Así que cedí la escalera a un colega para que mientras tanto bocetara y me la trajera luego. Esperanzado miraba a la gente que pasaba por Corrientes tratando de encontrar algún basquetbolista conocido que aceptara sostenerme en los hombros. A todo esto la nena ya se había volcado la pintura azul sobre su cuerpo y parecía un Pitufo. Había pasado ya casi una hora y media desde mi llegada. Parte de ese tiempo lo invertí tratando de interpretar el significado y la relación que tenía con el tema “libros” el dibujo de una participante que mostraba la única imagen de un zorro, todo ocre con pintitas negras que le demandó como una hora de trabajo, ¿O sería el lobo de Caperucita? Cuando se despejó el lugar y pude arrimar por fin la escalera comenzó el segundo capítulo del drama. Imposible llegar hasta arriba, ya sobre la pequeña plataforma de la escalera, que se movía peligrosamente, la única opción fue colgarme con la mano izquierda del borde superior del muro ayudado por el próximo usuario de la escalera que esperaba ansioso, y comenzar a bocetar con la mano libre sin la posibilidad de alejarme para tener una visión panorámica ni consultar el boceto impreso que tenía en la mano izquierda con la que me agarraba como un panda ¡Y para colmo descubro que la superficie no era suficientemente mate y el lápiz no tomaba! Así que descendí y fui en busca de una tiza. Cuando la conseguí (un resto de color anaranjado) volví a trepar , muy lejos de sentirme como Miguel Angel encaramándose a la Capilla Sixtina, más bien era King Kong prendido en el rascacielos. Así empecé el nuevo intento, pero las luces de la calle producían brillos por todos lados sobre la chapa blanca, y mientras desde la vereda de enfrente las estatuas de Olmedo y Portales parecían reírse de la escena, dije basta y tiré la tiza. Por suerte tenía un marcador permanente negro y me largué con la osadía de bocetar directamente, sin poder alejarme más de 30 centímetros y estirándome para uno y otro lado, simplificando el proyecto original. El desastre ya se anunciaba. Terminé rápidamente antes de que alguien del PRO me bajara a patadas. En la vereda seguía el enjambre humano disputándose los pinceles y la escalera y reclamando la pintura que se agotaba, finalmente el blanco desapareció. Otros, los tempraneros, seguían lentamente con sus enormes trabajos, excedidos en superficie y en el tiempo reglamentario y posando y dando entrevistas a los medios. Por momentos le buscaba el lado positivo a esta Babel pictórica y pensé que si dejaban entrar a 200 tipos más podríamos fácilmente entrar en el Guiness. 


Para concluir mi “obra” quise darle un poco de color. Pensé en la variante moderna de arrojar desde abajo una esponja embebida en pintura sobre el adefesio, en una salvadora alternativa de “action painting”, pero consideré más prudente volver a subir antes de que me arrancaran la escalera. ¿Lo vas a pintar?, me preguntó un desesperado que ya me tironeaba la escalera. "Si sos impresionable mirá para otro lado" iba a decirle. Y ahí fui en la solución final con una bandeja que encontré con pintura reseca y un pincel en ruinas. El desastre ya era insalvable, ni Da Vinci podría revertirlo, así que repartí el color disponible como si maquillara a una vieja de 100 años, y con el último esfuerzo y pocas ganas puse la firma reglamentaria con el deseo que el tiempo o alguna pandilla nocturna la borrara pronto. Después de bajar sentí cierta satisfacción, no por el desastre perpetrado, sino porque notaba que la frustración no iba a dejar secuelas importantes y esperaba superar el deseo de salir a pintar graffitis en los baños públicos. Antes de desaparecer recorrí los 33 metros del mural entre la marea humana y vi muchos trabajos que justificaron el sacrificio de esa noche inolvidable. Entre ellos el de Maicas, que seguramente pasará satisfecho por el lugar. No sé si yo podría hacerlo. ¿Será exagerado irme del país…?


                             
                        Y finalmente el boceto del proyecto original y el resultado final:

domingo, 11 de septiembre de 2011

SOLANO LÓPEZ A LA ETERNIDAD

Hoy debo hablar de otra muy sentida pérdida, lamentando que este espacio sea una sucesión de emotivos adioses. Ahora nos dejó un maestro de la historieta: Francisco Solano López, talentoso y querido artista.


Ya se ha dicho todo de él, aquí y en el exterior. Se fue hace pocos días dejándonos las imágenes de su impactante Eternauta, obra maestra de la historieta mundial, creado junto a su compañero y guionista Germán Oesterheld (perseguido y desaparecido en época de la dictadura). Dos máximos referentes de la historieta mundial.

Solano pudo eludir a los asesinos que tomaron el poder en 1976 y tuvo la entereza de seguir trabajando desde Europa. Hablaba poco, quizás llevando el sufrimiento de los desterrados, quizás encerrado en su mundo fantástico de tantos personajes que hablaban a través de su triste mirada. Modesto y generoso como tantos grandes. No olvidaré la amplitud de esa generosidad cuando hace unos pocos años le hablé de un coleccionista italiano y estudioso de su obra que estando de visita en la Argentina quería conocerlo. Con toda amabilidad nos recibió en su casa y le habló apasionadamente de sus trabajos, respondió detalladamente todas las preguntas y habló cordialmente de su vida en Roma.

Así era, así lo recuerdo y sumo a esta modesta anécdota personal todo el aprecio de sus colegas y el respeto que se ganó merecidamente. Nos queda la satisfacción de haberlo visto feliz en todos los homenajes que recibió en sus últimos meses de vida, cuando sin imaginarlo entraba a la última página de su vida. Eterna…eternamente.


                         Solano López junto a la imagen del Eternauta (Telam)




En la foto con Solano López durante una reunión en el Museo de la Caricatura, junto a otro grande de la historieta ya fallecido: Alberto Salinas.

viernes, 26 de agosto de 2011

ADIÓS PENI

En la entrada anterior hablaba de la Muestra en la Alianza Francesa. La inauguración, con gran cantidad de público, fue un momento grato de reencuentro de colegas. A pocos días de esa emotiva noche me duele pensar que esa sería la última vez que hablaría con Peni. El corazón le dijo basta a los 49 años.


Un gran tipo. Talentoso y también con la modestia de los grandes. En este espacio quiero asentar mi homenaje, breve como su vida. Y no me resigno a despedirme de su imagen y esa mesura que sumaba a su aspecto cuando hablaba, que inducía espontáneamente a recordar a Cortázar. Entre esta última escena y aquella primera visita a Humor, acompañado por Palomares, se desarrolla una excelente obra como guionista y dibujante. Será recordado por su paso por Humor, SexHumor, Billiken, Genios y muchas más publicaciones de Argentina y el exterior. Co-guionista de exitosos ciclos de televisión: La Biblia y el Calefón, Peor es nada, La Noticia Rebelde, etc. Dentro su aparente solemnidad destellaba la genial pureza de su humor, versátil morisqueta de su amplio talento.

Seguramente los lectores de tantas publicaciones que lo tuvieron en sus páginas lo recordarán con cariño, pero también con mucha pena por lo que todavía tenía para dar, y que este inesperado ataque del destino se lo impidió.

En estas fotos revivo el feliz momento en que exponíamos en la ex ESMA nuestros trabajos publicados durante la dictadura.


viernes, 3 de junio de 2011

SEGUIMOS ANDANDO...

Luego de tantos devastadores golpes, cuando la ausencia de queridos colegas todavía entristece nuestra memoria, volvemos a aparecer. Cascioli, Ferro, Fabre, Trillo...ya no están con nosotros para aportar su talento, y sería interminable la cadena de recuerdos y homenajes que podríamos elevar en este espacio.
La gratitud de la gente ya sumó sus palabras a la gloria. Sobre el eco inmortal de sus obras, ya percibida esta compartida soledad que nos sitia cruelmente, nos decidimos a señalar la tarea y el constante esfuerzo de otros colegas que gratamente nos alientan en los pasos culminantes de nuestra vida.
Por eso hoy estamos nuevamente para anunciar la muestra que se inauguró en la sede de la Alianza Francesa. Garaycochea, Meiji y Libman exhiben todas las facetas de su talento. Desde el humor al más exquisito ejercicio de la plástica. "Los dos lados", como acertaron en catalogarla. Una noche magnífica. Un encuentro de amigos celebrando la pasión de estos artistas.
Entre las presencias destacadas debemos mencionar a Oscar Grillo, un genio del dibujo humorístico y la animación que reside en Inglaterra. Una persona extraordinaria por su calidez y humildad. (Ver sobre Grillo)
Me permito mencionar el esfuerzo de Carlos Garaycochea, que reponiéndose de un problema de salud, aportó el entusiasmo de sus 82 años en la noche de la inauguración. Los que admiramos su capacidad y toda su trayectoria, que excede a estos "dos lados", nos sentimos halagados por su presencia y amistad. Complementan estas palabras las siguientes imágenes, entre ellas las tomadas con Meiji, Garaycochea y Grillo.